Patología

ESTENOSIS LUMBAR

La columna lumbar está formada por cinco vértebras lumbares.

La parte anterior de las vértebras o cuerpo vertebral se une a cada uno de los siguientes mediante la intercalación de una estructura fibrosa llamado disco intervertebral. La parte posterior de las vértebras forma un arco óseo. La suma de todos los arcos superpuestos constituye el canal lumbar. Esta disposición ocurre de un modo análogo en la columna cervical y en la columna torácica o dorsal.

La estenosis lumbar es una condición patológica debida al estrechamiento del canal lumbar, que puede causar compresión de las estructuras neutrales que se alojan en su interior, ya sea el saco dural con los nervios raquídeos, o los propios nervios raquídeos que emergen por los agujeros de conjunción. La compresión de los nervios puede causar dolor lumbar, en los glúteos y en las piernas, claudicación, dolor y disminución de la sensibilidad en las piernas. Un síntoma común es la mejoría del dolor al inclinarse hacia delante, o el agravamiento del dolor al llevar el tronco hacia atrás. Los pacientes con estenosis lumbar suelen caminar algo agachados para evitar el dolor, tienen que detenerse frecuentemente para sentarse, y caminan mejor cuesta arriba que cuesta abajo.

Hay varias formas de estenosis lumbar:

  • La más común es la estenosis lumbar degenerativa, que ocurre a medida que avanza la edad. El crecimiento exagerado de los huesos, los ligamentos, y la deformidad de las articulaciones, puede producir estenosis generalizada (a varios niveles de la columna) o bien segmentaria (en un solo nivel vertebral). La estrechez condiciona un compromiso de espacio para los nervios y se producen una serie de síntomas, como dolor lumbar y en los glúteos, claudicación neurógena y dolor irradiado a las extremidades. La claudicación neurógena es la imposibilidad de caminar de manera prolongada a causa del dolor, precisando sentarse para aliviarlo.

  • La estenosis lumbar congénita es menos frecuente, y puede presentarse a cualquier edad, a menudo entre los 30 y los 40 años. Se debe a una estrechez congénita del canal lumbar. Las causas no están muy claras pero posiblemente sea debido a trastornos del desarrollo en la primera infancia.

  • La estenosis secundaria a un desplazamiento de una vértebra hacia delante o hacia atrás. Se denomina espondilolistesis, y en función del grado de desplazamiento puede producirse mayor o menor estrechez en el segmento vertebral afectado.

  • La estenosis lumbar que produce síntomas requiere tratamiento, que inicialmente será farmacológico y rehabilitador. Si no se consigue aliviar el problema, se precisarán técnicas invasivas como infiltraciones epidurales de corticoides. La cirugía es el último recurso, y existen diferentes técnicas quirúrgicas que pueden solucionar la estrechez.

HERNIA DISCAL

Los discos intervertebrales son estructuras anatómicas que se encuentran intercaladas entre los cuerpos vertebrales. Proporcionan flexibilidad a la columna, a la vez que ayudan a amortiguar las cargas que ésta recibe.

Un disco intervertebral está constituido por una parte externa llamada anillo o annulus, de consistencia fibrosa y de disposición en capas, y una parte interna o núcleo pulposo, de consistencia más gelatinosa al contener más agua.

Con el transcurso de los años, y muchas veces por problemas intercurrentes a lo largo de la vida, los discos tienden a sufrir degeneración fiscal. Se produce una deshidratación de la parte central o núcleo pulposo, a la vez que se deteriora la calidad de las fibras del anillo, pudiendo resquebrajarse o presentar roturas o fisuras. Cuando una fisura es suficientemente amplia, puede producirse una salida al exterior de parte del material del núcleo, que recibe el nombre de hernia de disco o hernia fiscal. Si el material fiscal herniado o hernia fiscal entra en contacto con una de las raíces nerviosas, puede producir una inflamación muy intensa en el nervio, dando lugar a dolor que se irradia, generalmente por la pierna o por el brazo (dependiendo de la localización del problema, lumbar o cervical). Esto se denomina radiculalgia. Familiarmente se conoce con el término de “ciática”. Muy a menudo se acompaña de dolor y espasmo muscular en la zona lumbar.

Si se produce compresión de la raíz nerviosa por la hernia, comienzan los problemas de aporte sanguíneo al propio nervio, y éste puede deteriorarse y quedar afectado. Es lo que se denomina radiculopatía. En estos casos el dolor puede acompañarse de hormigueo, pérdida de la sensibilidad en el área del dolor, e incluso pérdida de fuerza en la extremidad afecta. Muchas veces se encuentran hernias discales en pacientes que se practican una resonancia (RMN) o un topografía o scanner (TAC), de manera fortuita. La presencia de una o más hernias discales en una imagen no significa necesariamente que exista dolor. De hecho, el dolor puede deberse a otra causa, como la artrosis de las articulaciones de la columna. Por otra parte el hallazgo de una hernia fiscal en un paciente que padece dolor radicular o “ciática” no implica necesariamente que se deba intervenir para extraer la hernia. Previo a la cirugía existen otros tratamientos que pueden ser definitivos, como son infiltraciones, tratamientos intradiscales, radiofrecuencia pulsada, y otros.

Síndrome de dolor regional complejo (también llamado distrofia simpática refleja)

El síndrome de dolor regional complejo (CRPS, por sus siglas en inglés) es una trastorno de dolor crónico que se cree es el resultado de una disyunción en el sistema nervioso central o periférico. Las características típicas incluyen cambios dramáticos en el color y la temperatura de la piel en la extremidad o parte del cuerpo afectada, acompañados por un dolor candente severo, sensibilidad de la piel, sudación e inflamación. El CRPS I frecuentemente es provocado por una lesión a un tejido; el término describe a todos los pacientes con los síntomas anteriores, pero que no tienen una lesión subyacente a los nervios.

Los pacientes con CRPS II experimentan los mismos síntomas pero sus casos están claramente asociados con una lesión a los nervios. Entre los términos que se usaban antiguamente para describir al CRPS están "el síndrome de distrofia simpática refleja" y "causalgia". El CRPS puede comenzar a cualquier edad y afecta tanto a hombres como a mujeres, aunque la mayoría de los expertos están de acuerdo en que es más común en las mujeres jóvenes

DOLOR ONCOLOGICO

El dolor oncológico es un problema de primera magnitud, hasta un 95% de los pacientes con cáncer en estadios avanzados tienen dolor (WHO, 1996).

El tratamiento adecuado precisa una historia clínica en la que se valore específicamente el dolor y que abarque aspectos físicos, psicológicos y sociales. Las exploraciones complementarias serán seleccionadas con el objetivo de diagnosticar sus posibles causas. La evaluación se hará de modo continuo y las quejas del paciente deben tenerse siempre en cuenta.

El dolor oncológico es un problema de primera magnitud, hasta un 95% de los pacientes con cáncer en estadios avanzados tienen dolor (WHO, 1996).

El tratamiento adecuado precisa una historia clínica en la que se valore específicamente el dolor y que abarque aspectos físicos, psicológicos y sociales. Las exploraciones complementarias serán seleccionadas con el objetivo de diagnosticar sus posibles causas. La evaluación se hará de modo continuo y las quejas del paciente deben tenerse siempre en cuenta.

¿Deseas agendar una cita con nosotros?